¿Qué puedo esperar?

"Si eres afortunado, tu sanación ocurrirá de la forma deseada, si eres más afortunado aún, tu sanación llegará de una forma que jamás habrías soñado, de una forma que el Universo ha reservado especialmente para ti."

 
La Sanación Reconectiva y la Reconexión, no son una terapia, no “trata” ninguna enfermedad. El practicante de la Reconexión no se centra en el problema. Él “sabe” que el universo “sabe”, es un “facilitador” de la información reservada para el cliente que se está sanando. El Universo no ve enfermedades, lo que percibe son “disfunciones” provocadas por cada ente en particular, Él se limita a “dar información” a nuestro código (ADN), produciendo desbloqueos y activando partes de éste.


La sanación puede llegar de muchas maneras. La mejor manera de permitirla es estar en un estado de expectación, sin apego al resultado. Túmbate en la camilla, relájate, cierra los ojos y simplemente siente. Observa. Conviértete en el observador y el observado.


Permanece relajado, tumbado de espaldas en la camilla o en cualquier otro lugar cómodo que hayas escogido, cierra los ojos y siente. Simplemente siente. Retira el proceso de pensamiento participativo y simplemente observa lo que sientes. Cuando no sientas nada, quédate tumbado y suéltate, como si estuvieras disfrutando de un descanso inesperado.


No sugiero que intentes poner la mente en blanco o no pensar en nada. Como norma, la gente tiene dificultad con el concepto de no pensar en nada. La mente siempre está funcionando. Sugiero que simplemente tomes nota de cualquier cosa que atraiga tu atención. Esto te ocupa y tiene la tendencia de aliviar el estrés que surge cuando intentas no pensar en nada y no sabes como hacerlo. Pon la atención dentro de tu cuerpo y permite que viaje a través de ti. Observa cualquier cosa que percibas fuera de lo normal, así mantendrás a la mente ocupada sin que se pierda en los “deberías” y los “no deberías”.


No respires de manera especial, no visualices escenas relajantes ni resultados deseados, no medites ni repitas “mantras”, silenciosamente o de ninguna otra manera, y no hagas nada que yo no haya mencionado o que otra persona piense que podría ayudar. No ayudará. Simplemente aportará lo que ya eres capaz de hacer por ti mismo e interferirá con tu capacidad de disfrutar la plenitud y la realidad de la experiencia. Cuando estés preparado para soltar y no intentar dirigir o mejorar la experiencia, cuando tu ego esté apartado lo suficiente para que no intentes “rizar el rizo” estarás listo para experimentar lo que hace a La Sanación Reconectiva diferente y real.


Estarás a punto para recibir.




COSAS QUE PUEDEN SUCEDERTE EN LAS SANACIONES RECONECTIVAS Y EN LA RECONEXIÓN.
- Parpadear con los ojos cerrados, los ojos se mueven contínuamente- Los dedos de las manos o de los pies se mueven o quieren moverse involuntariamente.- Calor, frío, hormigueo en dedos manos, piernas, cabeza, rodillas; agujetas, pinchazos, cosquillas, chispazos- La boca se seca, sed, no poder abrirla- Un suave soplo de viento frío- Lágrimas, tristeza, recuerdos antiguos- Tener la sensación de que hay más gente en el consultorio o que entra y sale gente- Felicidad, alegría, reir sin razón- Oir viento, o ruido fuerte de botellas, de calle, niños que juegan,..Oir caravanas de coches, claxon, ruidos ajenos al lugar donde estas- “Como si me tirase una cuerda para levantarme…”- Empujar, bostezar, tragar, atragantarse- El vientre se hincha, grandes suspiros- Marearse, sueño, adormecerse, perder el conocimiento, sentirse como si salieras de una anestesia- Sobresaltos que hacen moverse partes del cuerpo, movimientos bruscos de éste.- Cambio de densidad del aire- Ver luces, sombras-, oir cosas- percibir olores- .- Hacer movimientos con el cuerpo que no puedes hacer conscientemente- Hay personas que no sienten nada, como el mismo Eric Pearl